Tengo la sensación de que olvido algo. Es el último día del año. Salir de casa, pagar algunas deudas de la ong, con el dinero que vamos sacando en el stand con los lápices... Recoger comida para repartir en el stand, no tengo la llave., la pido prestada al Doctor Pernas... aparece un marinero seneglaés con los papeles para reagrupar a su mujer y a su hija pequeñita... corriendo para el stand. Ya había abierto Cris. Venta de lápices. Unas personas se interesan por el proyecto y están decididas a ayudarnos. Fijamos una cita. Voy al Centro Penitenciario de Teijeiro con el hermano de un senegalés que está internado por ser supuestamente capitán de uno de los cayucos que llegaron a Canarias. Lo dejan salir 3 días. Me hago cargo de él. El funcionario me pide el DNI y me dice, “aunque no hace falta, porque puedo escribir su nombre sin fallar una letra”.... Todos los días lo llevaré a presentar en la comisaria de la PN. Es un chico excelente. Ha sido bien tratado y me enseña orgulloso el título oficial de “Monitor Deportivo”. Durante el trayecto de vuelta, sin sacar los ojos de la carretera, echo varias veces la mano para atrás y me la aprieta fuertemente. Corriendo al stand, ya había abierto Cris y con Ana estaban haciendo bolsas de comida para los chicos de la venta ambulante, que antes de volver a casa pasan por el stand a recoger una bolsa de comida. Venta de lápices.... y a las 8,30 cerrar y para casa.... las uvas, las uvas... sabía que me olvidaba algo. Las uvas. Muchas felicidades a tod@s. Hasta mañana.